La impresión digital de etiquetas ayuda a mejorar la diferenciación y la sostenibilidad a la vez que aumenta la eficiencia en la producción y en toda la cadena de suministro. Las etiquetas digitales permiten una comunicación más actualizada y relevante con los consumidores a través de cambios rápidos e impresión de información variable (IV). La impresión bajo demanda también reduce drásticamente los costes asociados con el inventario y las revisiones.