La mayoría de nosotros nos hemos sentido frustrados en algún momento al tratar de quitar las etiquetas de un producto nuevo. En un estudio reciente en EE. UU. realizado por Avery Dennison que incluía a más de 800 consumidores, ocho de cada diez entrevistados tuvieron dificultades para quitar una etiqueta en el último año*. Las compras relacionadas con la cocina presentaron las dificultades más grandes. Más de la mitad informó que quedaba un residuo pegajoso en el producto, y cuatro quintos dijeron que habían sentido frustración al quitar una etiqueta.
La lealtad a la marca puede verse amenazada por una etiqueta minorista que proporciona una experiencia negativa para el cliente, lo que podría incluir marcas permanentes o demasiado tiempo dedicado a quitar la etiqueta. También pueden producirse devoluciones de productos como resultado. Aun así, los compradores de etiquetado siguen sin reconocer la importancia de elegir un material de etiquetado removible adecuado y optan por la construcción removible incorrecta o, incluso, por una etiqueta permanente. El desafío para los convertidores de etiquetas tiene dos vertientes: cómo generar conciencia y la demanda resultante en los usuarios finales, y cómo acceder a los recursos que necesitan para las aplicaciones de etiquetas removibles confiables.
Cuándo usar etiquetas removibles
Las etiquetas removibles o temporales pueden ofrecer información de seguimiento, precio, identificación del producto o promociones. Todo debe ser fácil de quitar cuando ya no se necesita. Algunos ejemplos de aplicaciones incluyen etiquetas de promociones o minoristas (etiquetado de precios, revistas y libros); pegatinas para ventanas, etiquetas para casas de subastas y etiquetas de administración.
Selección de un material de etiquetado removible
Las etiquetas removibles se pueden seleccionar de manera previsible dada la información y los recursos correctos, y con un abordaje metódico que tenga en cuenta todos los factores relevantes. Estos factores incluyen lo siguiente:
- material del sustrato, porejemplo, acero inoxidable, vidrio, cerámica, madera, polietileno de alta densidad, polipropileno o poliéster;
- el producto al cual se aplicará, porejemplo, si es plano, curvo, con textura, corrugado, revestido con barniz o aceites;
- frontal de etiqueta, que puede ser papel o film;
- tamaño de la etiqueta;
- fragilidad del producto al que se aplicará;
- requisitos de durabilidad;
- factores ambientales.
Si alguno de estos factores es incorrecto, los problemas resultantes incluyen un frontal con papel desgarrado, un efecto fantasma del sustrato (un área borrosa de decoloración abandonada), residuo del adhesivo y un aspecto de “mariposa” (donde los bordes de la etiqueta se despegan).
Avery Dennison asesora a convertidores y usuarios finales, y colabora con ellos, para asegurarse de que se escoja la solución indicada para aplicaciones removibles individuales. Una asistencia técnica así de cercana es importante porque las variaciones relativamente pequeñas pueden marcar una diferencia (de modo que lo que funcionó la última vez podría necesitar un ajuste esta vez, a menos que todos los factores permanezcan sin cambios).
Al contar con la gama más amplia de tecnologías de adhesivos removibles de la industria, Avery Dennison puede satisfacer la mayoría de las necesidades de aplicaciones removibles, incluidos papeles de primera calidad, films y materiales térmicos. La gama incluye materiales reciclados y con certificación FSC® para mejorar con respecto a la sostenibilidad.
